2ª Entrada - dimensionando desigualdades

Adolescentes + Redes Sociales + Reggaetón: tenemos un problemón.

En mi experiencia de 10 años trabajando la prevención de riesgos en internet y de la violencia de género con adolescentes de ESO y Bachiller, dentro del Plan Director para la Convivencia y Mejora de la Seguridad en los Centros Educativos y sus entornos, de la Secretaría de Estado de Seguridad, aprecio un problema bastante grave, que a continuación cuento.


LAS REDES SOCIALES O EL EXHIBICIONISMO HECHO NORMA.-

Las Redes Sociales, además de ser, desde el punto de vista técnico, una aplicación informática, igual que puede ser Microsoft Word o el reproductor de música Winamp, desde el punto de vista social podemos equipararlo al Desembarco de Normandía de un modelo cultural ajeno a nuestra sociedad.

Para ponernos en situación, vamos a imaginar cualquier película norteamericana ambientada en adolescentes de Instituto; el guión de estas películas sigue casi siempre el mismo patrón: chica tímida y feucha vive en secreto su amor por el chico capitán del equipo de futbol/baloncesto/canicas que siempre está enrollado con la capitana del equipo de animadoras; al final un quiebro del guión hace que el capitán se fije en la chica feucha, se enamore de ella, la lleve al baile de fin de curso, sean declarados el Rey y la Reina del Baile, y la pareja más popular del Instituto.

Bien, para los adolescentes norteamericanos el concepto de "popularidad" en el Instituto se convierte en un factor determinante de su "éxito" social en ese entorno; todos quieren ser amigos de los "populares", todos quieren imitar al "popular", y todos huyen de los "impopulares" también llamados "nerds" (empollones lerdos) como de la lepra.

Las Redes Sociales principales: Instagram, Facebook, y TikTok (antiguo Musical.ly), cuando llegaron a España, lo hicieron precedido de un gran éxito en sus países de origen, y los jóvenes españoles se pusieron observar a la variopinta fauna que puebla ese bioma, y sus costumbres.

Así, descubrimos rápidamente que un concepto que ha funcionado durante miles de años, que es el de amistad, puede ser cuantitativo en lugar de cualitativo, por primera vez en la historia podemos contar el número de amigos que tenemos, y en base a ese guarismo atribuirnos un determinado status social.

Y ese descubrimiento del párrafo anterior llevó a otro descubrimiento aún más interesante, y que afecta de forma fundamental a las mujeres: cuanto más enseñan más "likes" y más sube el contador de amigos/seguidores.

Las famosas y los famosos patrios de medio pelo han descubierto que no hay nada mejor que colgar una foto en pudoroso desnudo, por aquello de la censura de las redes, para aumentar exponencialmente el número de personas que hablan de ell@s. Esas personas, que por desgracia son iconos de referencia para nuestra juventud, provocan un efecto imitación entre sus seguidor@s: más seguidoras que seguidores, todo hay que decirlo, lo que ha derivado en una sobreexposición de chicas jóvenes con fotografías que enseñan infinitamente más de lo que sus padres y madres, ignorantes del contenido que cuelgan sus retoños, quisieran por mor de la buena reputación y decencia.

En definitiva, que hay una seria divergencia entre el dicho y el hecho ¿cual es el dicho?, pues todo el esfuerzo de la Sociedad en su conjunto para intentar erradicar la violencia de género, propiciar la igualdad de oportunidades, etc... ¿cual es el hecho?, pues miles y miles de adolescentes que se sienten halagadas cuando se cosifican y cuelgan fotografías cada vez más "sugerentes" para conseguir que ese contador de "likes" suba y suba cada vez más, y claro, cuantos más "likes" quieras, más tendrás que enseñar.

EL REGGAETON Y EL TRAP, O COMO INSULTAR Y DENIGRAR PÚBLICAMENTE A LAS MUJERES SIN ENFRENTARSE RESPONSABILIDADES PENALES.-

Si a Hitler lo que le hundió su estrategia fue la apertura del segundo frente por parte de los Aliados, nuestro segundo frente viene de la mano de la ¿cultura? representada en los gustos musicales de nuestros menores, concretamente me refiero a los omnipresentes reggaeton y trap, cuyas letras son, simple y llanamente, constitutivas de infracción penal.

Te gusta en la cama como te maltrato
Quieres que te lo meta a cada rato
Cuando está sola jugamos al ratón y al gato
Yo bajo sin peros, yo soy el bombero
Que te apaga el fuego en tu desespero
Me gusta lamberte los dos agujeros
Me gusta tu cara cuando entra entero

Como podemos ver en este fragmento de una canción de trap, si cualquier hombre le dice eso mismo a una mujer, da igual conocida que desconocida, con toda la razón nos ganaremos una denuncia en la comisaría más próxima.

Bien, pues el resultado, entre la juventud, no es sólo que no se rechacen, es que encima se hace apología de esta música, se graban vídeos haciendo coreografías que hacen justicia a la letra que representan, y con ello se exponen como objetos sexuales.


Aquí podemos ver un ejemplo: https://www.youtube.com/watch?v=OPULtEdKZDk


RESUMEN: AVANZAMOS COMO LOS CANGREJOS.-

O sea, hacia atrás: por una parte los Poderes Públicos y la Sociedad lanzan un mensaje de la necesidad de empoderar a la mujer, de romper techos de cristal, etc..., y por otra parte los espacios de socialización horizontal (que en eso se han convertido las Redes Sociales), los modelos icónicos juveniles: las Kardashian, Cristina Pedroche y demás familia, y los actuales gustos musicales transmiten el mensaje exactamente contrario al de los Poderes Públicos y la Sociedad.


VALE, PERO AL FINAL ¿VAMOS GANANDO O VAMOS PERDIENDO?.-

Pues más perdiendo que ganando, en las diapositivas 29 y 30 del siguiente documento:


Puede verse lo que la profesora de la Universidad de Granada Dª. Carmen Ruiz Repullo ha dado en llamar "identidades hegemónicas", o sea, las cualidades que mejor y peor se valoran por parte de los chicos y las chicas cuando se fijan en alguien del género contrario.

El resultado de lo que gusta es bastante desalentador, y en buena medida responde a ese modelo de masculinidad y de femineidad condicionado por los nuevos medios de relación horizontal (las redes sociales) y las ideas imbuidas por la ¿cultura? que consumen.

Tenemos un trabajo arduo por delante, desesperante a veces, cuando en una clase de 4º de ESO las chicas defienden, en el año 2020, determinados mitos del amor romántico, como los celos o la sumisión de la mujer en la pareja.

El problema es que las Redes Sociales llegaron para quedarse y lo han hecho, los usuarios han desarrollado una identidad digital al margen de su identidad tradicional, y en muchas ocasiones donde más libres se muestran para mostrarse tal y como se sienten es en el mundo digital, lejos del control paternal y de las convenciones sociales.

Hace falta una intensa labor pedagógica para conseguir revertir la situación, pero bueno, para eso estamos aquí ¿no?.
  




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